
En este nuevo paraje pudimos dejar nuestra huella positiva con la limpieza de la Playa de Bristol, con un mural en la sede de la Cruz Roja Fuerteventura, donde conocimos un poco más sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible y con el equipo de diseño del BBVA nos abrió las puertas al Desing Thinking. Aprendimos que podemos y debemos ser promotores del cambio. El mundo se transforma con nuestro ejemplo, con nuestras acciones y no con nuestras opiniones.
El sábado nos adentramos en el corazón de la isla para visitar la Finca de Pepe, en Betancuria, donde pudimos conocer las labores agrícolas y ganaderas y la elaboración del famoso queso de Fuerteventura.
Carlos Givaja, fotógrafo profesional y Alba Cuadrado, antigua rutera nos han inspirado con su emprendimiento y sus proyectos, mostrándonos la infinidad de caminos que podemos seguir, y el aprendizaje que ello conlleva.
Nos despedimos de Fuerteventura desde las Dunas de Corralejo, uno de los paraísos que esconde esta maravillosa isla donde el dorado de la arena contrasta con el turquesa de nuestra Global, para dirigirnos rumbo a Lanzarote.




